El backspin, de una manera breve, es un efecto que le damos a la bola que cuando cae recorre una pequeña distancia de forma inversa. Este recurso nos permite tener mayor control sobre la bola en el green. En este artículo, te voy a explicar las claves que necesitas saber para poder empezar o mejorar tu backspin.
En algunas ocasiones, hemos podido ver como grandes deportistas del mundo del golf utilizan el backspin cuando realizan golpes dentro del green. El backspin, de una manera breve, es un efecto que le damos a la bola que cuando cae recorre una pequeña distancia de forma inversa.
Este es un buen recurso ya que nos permite tener mayor control sobre la bola en el green y tratar de ser más precisos en nuestros golpes de aproximación. En este artículo, te voy a explicar las claves que necesitas saber para poder empezar o mejorar tu backspin los días que juegues al golf o al pitch and putt.
Primero de todo, es importante que evites que entre cualquier material, como hierba, arena o barro, entre la cara del palo y la bola. Esto se debe a que estos residuos que se van quedando en el palo repercuten de manera importante en la fricción que se produce con la bola al golpearla. Al reducir esta fricción, aumenta el ángulo de lanzamiento y la bola no consigue coger el efecto necesario para hacer el backspin.
En muchas ocasiones, estudios han demostrado que cuando las estrías del palo están contaminadas con barro o hierba, la bola se lanza con un ángulo casi el doble de pronunciado y con la mitad del efecto de retroceso.
En este caso, tu intención debe ser que el ángulo de lanzamiento sea lo más bajo posible y que se produzca el máximo efecto de retroceso.
Para lograr el efecto del backspin, conviene utilizar un wedge, a poder ser con poco desgaste en las estrías. El diseño de estos palos te permitirá dar un golpe más recto y, por tanto, te ayudará a conseguir que la bola no pierda tanto efecto al caer. Esto se debe a que el ángulo de la cara del wedge es más pronunciado.
Los mejores diseños, si quieres elegir el palo perfecto, son los que tienen más espacio entre las estrías y además son “milled”, es decir, cuanto más áspera sea la cara del palo, mejor, ya que se generará más fricción con la bola al golpear.
No todas las bolas nos facilitan lograr el backspin, o al menos no lo hacen de manera tan sencilla. Las bolas que te ayudarán a dar este efecto suelen ser las más blandas. Esto se debe a que se agarran mejor a la cara del palo, generando así una mayor fricción y, como consecuencia, un efecto más pronunciado.
Puedes encontrar diversas marcas como Titleist, Callaway o TaylorMade, entre otras, que ofrecen bolas de la categoría "Soft" o "Super Soft". Estas son las más adecuadas para lograr el backspin.
Si estás pensando en dar un golpe con backspin, debes tener en cuenta varios factores importantes. Entre ellos, la correcta colocación de tu cuerpo, un tema que he tratado en otro artículo y que te será de gran ayuda.
Además, la situación en la que te encuentres en el campo también es muy importante, es decir, es más fácil lograr un backspin desde la calle que no desde los laterales o el "rough", donde la hierba suele ser más alta y puede interponerse entre la cara del palo y la bola.
Por último, al dar el contacto con la bola, es recomendable que el golpe se produzca en la parte inferior del palo, justo en las primeras estrías. De esta manera, aumentarás la fricción con la bola y generarás más efecto, más que si la golpearas con el centro de la cara como suele hacerse habitualmente.